Publicado el informe anual del consumo alimentario de 2016

Todos los años, el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente publica un estudio sobre grandes datos del consumo de alimentos en España, lo que permite hacerse una imagen completa de la situación de la alimentación en nuestro país y compararlo con los años previos.

Este informe puede descargarse AQUÍ  junto con el de los años precedentes y de él se pueden obtener resultados bien interesantes que pueden servir de punto de partida para el proceso de estrategia agroalimentaria en el que se ha embarcado la ciudad de Valladolid. Apuntaremos solo unos pocos.

Tras varios años de descensos, 2016 ha sido el primer año en el que sube la cantidad de comida que entra en los hogares de Castilla y León. Es apenas un 1,7% más, pero supone un notable cambio de tendencia. Además, se ha reducido el porcentaje de comida que se desperdicia.

Respecto a nuestra dieta, en Castilla y León hay algunos aspectos dignos de mención: estamos entre las Comunidades Autónomas con mayor consumo de legumbres, de pescado y de fruta y en las que menor consumo hacemos de refrescos procesados.

En el lado negativo de la encuesta, se observan un par de tendencias que podríamos calificar como ‘preocupantes’ y que son algunas de las que hacen más necesario un proceso como el que ha acometido Valladolid: aumenta el consumo de platos precocinados y se reduce el de productos frescos y la compra en comercios de proximidad.

El espacio que ocupa la alimentación en la vida diaria también refleja una tendencia interesantes: cada vez se asocia más la alimentación a la salud. Aunque destaquen contradicciones como la reducción de consumo de productos frescos ya apuntada, o que la pizza sea, por ejemplo, el segundo plato más consumido en los hogares españoles.

En definitiva, un buen material de partida para ver el espacio que existe para la relocalización de la cadena alimentaria.